George Sand.

Colección Grandes Mujeres, RBA.

Año de publicación: 2019.

Sinopsis.

George Sand desafió los paradigmas de la buena sociedad francesa para convertirse en la primera escritora profesional de su país. Superó un mal matrimonio, hizo frente al escándalo social, se atrevió a vestirse de hombre para acceder a lugares hasta entonces vetados a las mujeres y dio luz a una obra que, al hilo de la estética romántica, transgredió lo que se esperaba de las escritoras y los personajes femeninos, denunciando discriminaciones e injusticias.

Opinión.

Esta es uno de esos personajes que componen la colección de Grandes Mujeres que no conocía y me ha gustado leer su biografía.

Fue una escritora que nació a principios del s.XIX en París y lo hizo en una familia acomodada, aunque desde el principio hubo problemas entre su madre y su abuela paterna, ya que la abuela no quería a su nuera, porque no la consideraba digna de su hijo.

Independientemente de esto, la abuela se encarga de la educación de su nieta, que fue una niña que creció en la casa familiar, ofreciéndole una educación formal. También era una enamorada de la música, aunque estas habilidades no las desarrolló como a ella misma le hubiera gustado.

Tuvo una vida interesante, sobre todo, a nivel laboral porque fue la primera escritora que pudo vivir de su escritura en Francia, así como fue interesante su vida personal, en la que se casó con un hombre que la llegó a maltratar y con el que tuvo dos hijos. Con el hijo mayor siempre tuvo una gran relación mientras que con su hija (la menor de los dos) la relación siempre fue más convulsa, llegando a vivir periodos en los que no se hablaban.

Mantuvo una relación sentimental con el músico polaco Chopin durante diez años (después de separarse de su marido) y durante el mayor tiempo de la relación ejerció más de madre que de amante porque, aunque fue una mujer muy moderna para su época, no dejó de criarse en un ambiente que seguía a rajatabla las normas sociales establecidas de aquel momento.

Su obra es bastante extensa y, enseguida, comienza a tener buenas críticas y a ella se la clasifica como una escritora del romanticismo francés. Cabe destacar, entre su amplia obra, «Un invierno en Mallorca», que es un cuaderno de viaje autobiográfico en el que relata su estancia en la isla de Mallorca durante un invierno en el que decidió mudarse allí con Chopin y sus hijos para ver si el músico mejoraba su estado de salud, que siempre fue muy delicado, y fue allí donde le diagnosticaron tuberculosis, enfermedad que terminó matándole.

Años después mantiene una relación sentimental con un amigo de su hijo y dicha relación le trae más de un quebradero de cabeza. Como decía antes, la relación con su hija pasa por diferentes etapas, y no todas ellas buenas porque Solagne tenía un carácter bastante complicado y a la escritora le resultaba muy difícil lidiar con ella.

Ella no deja de escribir hasta ya el final, cuando comienza a sentir unos dolores muy fuertes y termina falleciendo a los 72 años a causa de un cáncer de estómago.

A nivel de estructura, el libro sigue la misma que los volúmenes anteriores, estando dividido en cinco capítulos. Comienza cuando ella es una niña, Aurore (como su abuela paterna) y habla de la invasión de Napoleón y aquella época convulsa que, precisamente, hizo que los padres de la autora se mudaran con ella a casa de la abuela paterna, cerca de París; en el último ya se relatan los últimos días de la autora, cuando se va encontrando cada vez peor y deja de escribir ante la pérdida de fuerza y ganas, hasta que finalmente fallece el 8 de junio de 1896.

¿Recomendaría su lectura? He de decir que me ha resultado un personaje interesante y peculiar, pero no ha sido una de esas biografías que me haya encantado, como otras que he leído de la colección. Si alguien está interesado/a en el romanticismo francés, leer la biografía de la autora, así como su obra puede resultar interesante porque indudablemente es una figura importantísima en el mundo literario, además del hito que supuso ser una mujer que se pudo dedicar a lo que ella quiso, convirtiéndose en la primera mujer escritora reconocida.

Otros libros de la colección:

Marie Curie.

Maria Montessori.

Frida Kahlo.

Jane Austen.

Indira Gandhi.

Agatha Christie.

Irena Sendler.

Virginia Woolf.

Clara Campoamor.

Hedy Lamarr.

Emmeline Pankhurst.

Jane Goodall.

Florence Nightingale.

Simone de Beauvoir.

Amelia Earhart.

Rita Levi-Montalcini.

Mary Shelley.

Audrey Hepburn.

–  Helen Keller.

Cleopatra.

Nellie Bly.

Emilia Pardo Bazán.

Josephine Baker.

Ada Lovelace.

Rosalind Franklin.

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