Colección Grandes Mujeres, RBA.
Año de publicación: 2019.
Sinopsis.
Virginia Woolf fue una escritora inglesa con una voz tan singular que logró modernizar por completo la literatura del siglo XX. Gracias a sus revolucionarias ideas, se convirtió en una figura esencial del feminismo cuya enorme influencia todavía perdura. Educada entre los férreos valores victorianos y la modernidad, Woolf rompió las ataduras familiares y sociales para perseguir su sueño de dedicarse a la literatura y vivir libremente, al margen de los convencionalismos.
Opinión.
Virginia fue una de las grandes figuras del siglo XX a muchos niveles. Esta feminista se convirtió en una de las mejores escritoras inglesas de la historia, no sin mucho esfuerzo, no sin mucho miedo.
Para empezar, diré que, en general, es una lectura que me ha gustado y me ha interesado por diferentes motivos, pero, también he de decir que ha habido ocasiones en las que se me ha hecho cuesta arriba porque hay pasajes un poco densos, aunque es una forma de demostrar diferentes periodos de su vida, que no fue nada fácil.
Nace en una familia acomodada y, a la edad de seis añitos, comienza a sufrir abusos sexuales por parte de un hermano mayor, cosa que la deja tocada para el resto de su existencia. Desde muy pequeña, tiene claro que su objetivo en la vida es convertirse en escritora. No piensa en el matrimonio porque cree que es algo que le puede alejar de su escritura, pero acaba casándose con Leonard Woolf, también escritor. En él encuentra a ese compañero en quien apoyarse, pero su vida, y concretamente la parte más íntima, se verá afectada por las secuelas de los abusos sufridos en su niñez, sufriendo recaídas que la tenían postrada en cama durante largas temporadas.
Una de las cosas que más me ha llamado la atención de esta lectura es que, pese a su “condición de ser mujer” (recordemos que hablamos de finales del siglo XIX y principios del XX), recibe un gran apoyo por parte de su marido y de su hermana, que le dan alas para dedicarse a la escritura de forma profesional, pero se pone mala (literalmente hablando) cuando va a publicar su primera novela (algo que se irá repitiendo cada vez que saca un nuevo libro). Tiene miedo absoluto a la crítica de su obra, cosa que luego fue sobre ruedas ya que se metió al público en el bolsillo desde el principio.
Otro momento clave en su vida, o a mí me lo parece, es en el que escribe «Una habitación propia». Para mí es el momento que supone un punto de inflexión en su literatura, momento en el que ella ya es más madura y expone deliberadamente y sin tapujos todas sus ideas acerca de la posición de la mujer en la sociedad del siglo XX.
También, muestra una fuerte determinación al declinar algunas propuestas de trabajo, como dar charlas en la universidad, alegando que, si la universidad no estaba permitida a las mujeres, ella como mujer no iría para ejercer, a su manera, una presión social, posicionándose al lado de las mujeres que no tenían ese acceso.
En definitiva, es una historia interesante de un personaje digno de admirar. Como decía antes, algunos pasajes son un poco más pesados porque ella está enferma y no puede hacer otra cosa que guardar reposo, sin poder dedicarse a nada más que a su recuperación. Pese a todo, es un personaje muy completo que lleva una vida con muchos altibajos, pero que merece la pena leer porque una de las moralejas que deja esta lectura es que, si uno muestra empeño y trabaja duro, puede conseguir lo que quiera, que es lo que, en definitiva, le pasó a ella.
Otros libros ya leídos de la colección:
– Marie Curie.
– Frida Kahlo.
– Jane Austen.
El Lado Oscuro 
19 comentarios en “Virginia Woolf.”