Oh, qué espléndida música.

Autora: Dorothy Evelyn Smith.

Editorial: Trotalibros.

ISBN: 9789992076477

Año de publicación: 2023.

Sinopsis.

¡Oh, qué espléndida la música de los días de la infancia, cuando todo era inmenso, el mundo entero era un paraíso por explorar y el paso del tiempo, una sucesión infinita de descubrimientos emocionantes!

Ruan Ashley rememora el tambor lejano de aquellos años previos a la Primera Guerra Mundial, cuando era una niña inteligente y soñadora que corría por los hermosos páramos junto a su querido David, lejos de la estricta mirada de su padre, pastor de la iglesia inconformista. Ahí sufre los primeros embates de la vida adulta, pero también descubre el significado de la amistad y el amor.

Escrita entre las bombas que caían sobre Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial, «Oh, qué espléndida música» no es solo una excepcional novela de formación con unos personajes inolvidables, también es un homenaje al tiempo de la inocencia, tanto a nivel social como personal; un mundo perdido para siempre.

Opinión.

Esta novela ha caído en mis manos gracias a haberme apuntado al club de lectura que organiza la librería Girasol. Este ha sido el libro elegido para el mes de septiembre y, aunque ya había leído críticas muy positivas acerca de esta historia antes de decidirme a apuntarme a la lectura, he de decir que ha sido mucho mejor de lo que me esperaba. Eso sí, lo que más me ha gustado de todo ha sido el poder comentarla con otras personas porque creo que es algo que siempre enriquece, pero vamos al lío.

La historia tiene tres partes que, aunque aparecen de manera diferenciada en el libro, a nivel de trama y de lectura no hay ningún salto temporal, sino que tienen continuidad según se van sucediendo. Cada una de estas partes hace referencia al lugar físico en el que vive la protagonista, Ruan, y es el páramo el que cobra mayor importancia a lo largo de toda la novela.

En todas estas partes, la narradora es la propia protagonista, que habla siempre en primera persona y en tiempo pasado. Además, hay que mencionar que Ruan tiene siete años al inicio de la novela y para mí es un punto muy a favor de la lectura cuando el narrador o narradora, como en este caso, es un/a niño/a. ¿Por qué? Bueno, ya lo he comentado varias veces, y es que creo que le aporta a la novela un punto de ternura e inocencia que no se aporta si el narrador es más mayor.

Con respecto a los personajes, todos ellos son fascinantes porque están muy bien definidos, pero me gustaría destacar tres de manera concreta:

– El primero de ellos, por supuesto, es el personaje de Ruan, esa niña de siete años que nos muestra su vida. Ya el nombre en sí me parece toda una declaración de intenciones porque me parece que tiene mucha fuerza y personalidad. Y ella, como no podría ser de otra manera, es un personaje fuerte, diferente e, incluso, diría que arrollador porque es un personaje que no cumple las normas o cánones de la época. Es una niña muy inteligente con una sensibilidad que, quizá, no sea propia de su edad, pero que hace que sea especial. Se da cuenta de todo lo que pasa a su alrededor y lo transmite de una manera absolutamente natural. Tiene una evolución magnífica a lo largo de las páginas, sin perder nunca su esencia, y es muy fácil que el lector/a empatice con ella y con todo lo que le toca vivir.

– Alaric, es el tío de la protagonista y aparece muy al final, pero es un personaje con una sensibilidad desbordante. Es muy conciso y reservado, pero se entiende perfectamente todo lo que tiene que ver con él: el trato a Ruan, su amor por ella, etc. Para mí es un personaje secundario que quiere pasar desapercibido pero que consigue el efecto contrario porque, desde que aparece, se vuelve indispensable, sobre todo, por el mensaje que transmite con sus actos.

– Y, por último, me gustaría destacar ese páramo como personaje indispensable en esta novela. Me gusta mucho cuando un lugar en concreto cobra tanta relevancia que se convierte, precisamente, en un personaje más. Y de los más queridos. Para mí, ponerme a leer esta novela era transportarme allí, a esos campos verdes, tan nevados en invierno, que tanto le gustaban a la protagonista y que la autora ha conseguido que también me gusten a mí.

En referencia a esto último, he de decir que el vocabulario es sencillo, así como las estructuras gramaticales empleadas. Desde luego, está muy bien traducido. Pese a tener una gramática y un vocabulario sencillo, he de comentar que también es muy descriptivo. Desde mi punto de vista, todas esas descripciones tan minuciosas que se hacen sobre determinadas cosas me han parecido un poco pesadas, llegándole a restar fluidez a la lectura en algunas ocasiones, pero sí que destaco esas descripciones acerca del páramo y que, gracias a ellas, el páramo para mí se ha convertido en un personaje más, como os comentaba antes.

La novela ocurre en tiempo pasado y se desarrolla en la Inglaterra de finales del siglo XIX, principios del S. XX, justo antes de que comenzaran las dos grandes guerras. En esta ubicación tan concreta de la trama y, por ende, de los personajes, no se nos puede olvidar el papel de la mujer en esa sociedad. ¿Por qué digo esto? Porque Ruan es un personaje tan potente y complejo que, a su manera, desafía todas las normas sociales de la época en la que le toca vivir y, desde mi punto de vista, lo hace de una manera muy natural. Hay otro personaje femenino que también desafía las normas convencionales de una manera mucho más directa e, incluso, elegante, pero no voy a comentar quién es porque es un spoiler en toda regla.

También me gustaría destacar que hay dos temas importantes que están presentes a lo largo de toda la novela:

– la muerte: Ruan tiene que convivir con ella a lo largo de su vida, por diferentes motivos, y lo hace de una manera que me parece hasta estoica. Supongo que ahí entra en juego, por lo menos en parte, esa inocencia de la niñez.

– la amistad: Ruan establece una relación de amistad muy sólida con otro personaje que se va afianzando a lo largo de los años y es una relación tan bonita que el lector/a disfruta cada vez que estos personajes se encuentran entre las páginas.

Y, por último, el final de la lectura me ha parecido acorde a la historia, pero yo esperaba que hubiera más acción. ¿Qué quiero decir con esto? Bueno, para mí el final queda muy abierto y, dentro de que no es un mal final (para lo que podría haber sido), me hubiera gustado más que las cosas hubieran quedado más atadas, más definidas. No puedo comentar más al respecto para no hacer ninguna revelación importante.

Puntos a favor:

– El personaje de Ruan.

– El páramo como localización.

– Durante toda la novela salen a relucir muchos libros porque se le da una gran importancia a este aspecto por todo lo que le aportan a la protagonista.

Puntos en contra:

– Muchas de las descripciones minuciosas que se hacen.

– Los capítulos, para mí, son demasiado extensos en general.

¿Recomendaría esta lectura? Sí, desde luego que sí. Ha sido una lectura que he disfrutado mucho, que me ha resultado muy entretenida Es posible que no sea para cualquier lector/a, pero si te gustan las historias bonitas, esas que se cuentan solas, que se disfrazan de una sencillez aparente, pero que, en realidad, muestran la complejidad de la vida, y consta de unos personajes muy buenos, deberías darle una oportunidad.

A destacar del club de lectura:

Ayer hubo bastantes opiniones parecidas en determinados aspectos. El de mayor coincidencia fue sobre la protagonista y su madurez, educación, cultura, inteligencia… Nos pareció un personaje muy potente y a todas nos gustó mucho, así como lo hizo el personaje de Alaric.

Estuvimos de acuerdo en la complejidad de la trama en sí y en lo bien escrita que está la novela y que, como sin contar mucho, te cuenta todo.

Hubo diferentes percepciones acerca de las muchas descripciones que se hacen a lo largo de las páginas, unas a favor de ellas y otras que opinaron que resultan un poco tediosas. Como habéis leído, yo en este punto me encuentro en un término medio porque las descripciones sobre el páramo me parecieron espectaculares y el resto no tanto.

Y ya, para finalizar, decir que a muchas de nosotras esta novela nos había recordado a «Mujercitas», que es una de mis lecturas actuales.